1. Magnitud del problema
La probabilidad de lograr un embarazo de una pareja fértil normal de 25 a 35 años de edad y con una vida sexual regular es de aproximadamente 25% el primer mes y en los siguientes 11 meses de 16% cada mes. Esto significa que aproximadamente entre siete y nueve de cada diez parejas, según la edad, que buscan tener un bebé lograron concebir en un plazo de un año. Sin embargo, esto implica que una a tres de cada diez parejas no lo lograran. Dentro de este 10 a 30% de la población en edad reproductiva, se encuentran las parejas que serán diagnosticadas como infértiles. Aproximadamente las tres cuartas partes son, en realidad, subfértiles, y pueden llegar a concebir mediante diversos tratamientos.
2. Definiendo la infertilidad
Definimos la infertilidad como la incapacidad de lograr la concepción, o de llevar un embarazo al término luego de 12 meses sin medidas contraceptivas. Allí se justifica la consulta médica y comenzar con los estudios correspondientes. Reduciríamos el período de espera a 6 meses, en caso de:
i) Edad de la mujer mayor de 35 años.
ii) Mujer con historia previa de: períodos muy dolorosos, irregularidad del ciclo menstrual, infección pélvica, cirugía ginecológica relevante o abortos previos, que nos hagan sospechar un riesgo aumentado de patología.
iii) Varón con conocimiento de probables problemas en la producción espermática por descenso tardío de los testículos, traumatismos severos o exposición conocida a radiación, quimioterapia ó tóxicos ambientales como plomo, pesticidas,etc. O que haya experimentado compromiso testicular en alguna enfermedad como parotiditis urliana (“paperas”).
Para lograr buenos resultados es importante no demorar la consulta especializada.
Los estudios para llegar a un diagnóstico de la probable causa no deberían exceder de 4 a 6 semanas.
3. Infertilidad en el varón
Es frecuente que se considere la infertilidad como un problema de la mujer. Sin embargo, en más del 50% de los casos es el hombre, en forma exclusiva o en combinación con la mujer, el que posee la dificultad.. En Fertilidad San Isidro sugerimos realizar estudios completos a ambos, al varón y a la mujer, desde el inicio a efectos de acelerar el diagnóstico y determinar cuál es el mejor tratamiento para cada caso sin demoras innecesarias. Para mayor información del factor masculino ver Causas masculinas de infertilidad.
4. Infertilidad en la mujer
La infertilidad de causa femenina puede ser por varios factores. Su médico de cabecera lo orientará en cuanto a la secuencia de estudios que deberá realizar para llegar al diagnóstico. El proceso de estudios no debería exceder los dos meses como máximo.
Las causas mas frecuentes son:
Problemas tuboperitoneales: son la causa más frecuente de la infertilidad. Pueden deberse a infecciones o cirugías previas por: apendicitis, quistes ováricos o embarazo ectópico. La endometriosis es uno de los problemas más prevalentes en este grupo. Frecuentemente, la cirugía laparoscópica es exitosa para tratar estas patologías. En otros casos, o si ésta fracasa, la FIV (Fertilización in Vitro) es una excelente alternativa terapéutica.
Déficit ovulatorio: es una causa frecuente especialmente entre aquellas con ciclos irregulares, asociados o no al desarrollo excesivo de vello. Se trata en forma muy eficaz con inducción de ovulación o con tratamientos específicos de la alteración detectada.
Migración espermática alterada: es responsable del 12 al 20% de los casos de infertilidad femenina o combinada. Se trata en forma exitosa con inseminación intrauterina, y si esta fracasa, con fertilización asistida de alta complejidad
Causas uterinas: las anomalías congénitas del desarrollo uterino, así como las patologías adquiridas (los miomas o pólipos uterinos o adherencias de las paredes del útero), pueden interferir con el logro o la continuidad del embarazo. Son tratables con cirugía histeroscópica, asociada o no a cirugía laparoscópica según los casos.
Edad de la mujer e infertilidad: es una de las causas más frecuentes de alteración de la fertilidad y en estos casos deben abreviarse los tiempos, pasando más rápidamente a terapias de alta complejidad.
Podrá profundizar los estudios de cada factor en Causas femeninas de infertilidad.
5. Hábitos saludables
En Fertilidad San Isidro nuestro objetivo es ayudarlos a maximizar las posibilidades de lograr el embarazo y a minimizar el riesgo de complicaciones, para llegar al final de la gestación con una madre y un hijo sanos.
Aprenda a manejar la ansiedad
La ansiedad puede contribuir a la infertilidad, alterando la producción espermática o el proceso de ovulación. A su vez, la infertilidad es una dura prueba para ambos miembros de la pareja y para la pareja como conjunto, porque genera diversas reacciones como: frustración, enojo, ansiedad, trastornos sexuales, e incluso depresión. El manejo de estas reacciones podrá ser supervisado por nuestro grupo de especialistas que ayudarán a disminuir el impacto del problema y del tratamiento en su vida diaria. Podrán ampliar esta información en aspectos psicológicos de la infertilidad.
No fume
Si fuma, le recomendamos que suspenda por completo o si no puede hacerlo que lo reduzca a un máximo de 3 o menos cigarrillos por día. El tabaquismo tiene un efecto negativo en la fertilidad tanto en el varón como en la mujer. La consecuencia es que se requirirá un mayor número de intentos de cualquier tratamiento para llegar al mismo resultado.
Además, durante el embarazo aumenta el riesgo de parto pretérmino, y bajo peso del bebe al nacer, entre otras complicaciones.
Evite el alcohol
El alcohol puede interferir con el logro del embarazo y producir defectos congénitos.
Limite la cafeína
Se sugiere evitar superar el límite de 2 tazas de café por día o 3 vasos de bebidas cola. Varios estudios han concluído que el consumo excesivo de cafeína disminuye la posibilidad de embarazo en la mujer y aumenta el riesgo de aborto espontaneo y de algunas alteraciones fetales.
Mantenga un peso saludable
El sobrepeso disminuye las posibilidades de éxito de los tratamientos y aumenta el riesgo de pérdida del embarazo. Ademas, en el caso de sobrepeso es mayor la incidencia de cesáreas por partos dificultosos. Por otro lado, los trastornos de la alimentación con tendencia a un peso excesivamente bajo (menos de 19 de IMC) asociado o no a un ejercicio excesivo pueden conducir a la anovulación. En cualquiera de los dos casos se sugiere tratamiento conjunto con un especialista.
No utilice drogas recreacionales
El uso de heroína y cocaína en el embarazo tienen efectos comprobados en el bebé y síndrome de abstinencia luego del nacimiento. La marihuana puede disminuir la producción espermática. Informe al medico el uso actual o anterior de drogas recreacionales y además advierta a su médico cualquier tipo de medicación que ingiera aunque sea en forma ocasional. También es importante informar al médico de otra especialidad que le prescriba un medicamento, que está buscando un embarazo. Evite utilizar cualquier medicación sin consultarnos durante el período de estudios y tratamiento.
Algunos suplementos vitamínicos pueden ayudar
Ingiera al menos 1 mg de ácido fólico por día. Diversos estudios han demostrado que la ingesta pre concepcional disminuye el riesgo de un grupo de malformaciones congénitas denominadas defectos de cierre del tubo neural. Por otro lado, el empleo de algunos complejos vitamínicos aparentemente disminuiría el riesgo de aborto y de algunos defectos cardíacos. Sugerimos el empleo de complejos ricos en vitamina E y Zinc, por su efecto antioxidante. El suministro de Omega 3 de aceite de pescado ha demostrado beneficios tanto en el varón como la mujer.
Contrólese para HIV, hepatitis B y C, rubeola y toxoplasmosis
Recomendamos el control en sangre para los virus de: HIV, hepatitis B y C, rubeola y toxoplasmosis previo a la búsqueda de un embarazo.
El ejercicio regular es beneficioso
El ejercicio regular moderado es beneficioso para la salud y para el logro del embarazo. Ayuda a aliviar tensiones y facilita el mantenimiento de un peso óptimo. Sin embargo, al realizar algunos tratamientos como la estimulación de ovulación, es posible que le solicitemos evitar ejercicios de alto impacto debido al agrandamiento de los ovarios.
Mantenga una nutrición variada y completa
La alimentación puede afectar la posibilidad de concepción y la continuidad del embarazo. Los pesos corporales extremos pueden alterar la ovulación. Mientras busca un embarazo es conveniente una dieta equilibrada, balanceada y completa.
Continúe con sus controles ginecológicos habituales
Durante el período de tratamiento para la infertilidad es necesario continuar con sus controles ginecológicos habituales, de ser posible con su ginecólogo de cabecera. Deberá realizarse una vez por año, control ginecológico completo incluyendo Papanicolaou, y examen mamario con mamografía de acuerdo con la edad y antecedentes familiares.
Mantenga relaciones sexuales con frecuencia
Para aumentar las probabilidades de tener un bebé, es conveniente mantener relaciones sexuales sin protección aproximadamente cada 2 ó 3 días. Es aconsejable tener relaciones durante la fase fértil de la mujer, en el momento de la ovulación o justo antes. La mejor manera de calcular el momento de la ovulación, si la mujer tiene ciclos regulares, es restar 14 días a la duración media de su ciclo. Lo ideal es mantener relaciones desde 2 o 3 días antes de la probable ovulación.