Los miomas uterinos o “fibromas”, son los tumores benignos más comunes. Se desarrollan a partir de la pared muscular del útero y aparecen en una de cada cuatro mujeres. El diagnóstico puede sospecharse por un sangrado uterino anormal ya sea en tiempo o cantidad, pero con frecuencia son asintomáticos y se detectan en un examen ginecológico de rutina o en una ecografía.
En general no requieren tratamiento salvo que: alcancen gran tamaño, crezcan rápidamente o deformen o contacten la cavidad uterina. Los miomas submucosos, es decir aquellos que crecen hacia la cavidad endometrial, se han correlacionado con un aumento del riesgo de: aborto espontáneo, parto prematuro, sangrado anormal en el postparto, y más recientemente como causa de falla de implantación embrionaria, impidiendo de este modo el logro del embarazo tanto en forma natural como con FIV. El diagnóstico puede sospecharse por la histerosalpingografia, pero es la ecografía con doppler color en manos de un especialista, la que nos permite identificar todos los núcleos miomatosos y definir su ubicación, tamaño y tipo de crecimiento. La descripción completa y minuciosa de todos los núcleos miomatosis es de gran importancia para un tratamiento completo, adecuado y exitoso en el momento de la cirugía.
Los miomas pequeños que crecen hacia la cavidad uterina se podrán extraer por vía vaginal con una resectoscopia histeroscópica (ver histeroscopia) En los casos de miomas de mayor tamaño que ocupan todo el espesor de la pared del útero se podrá realizar una miomectomía laparoscópica, intervención mínimamente invasiva que permite en la mayoría de los casos la extracción de los miomas a través de 3 pequeñas incisiones. El empleo de la cirugía laparoscópica se acompaña de un menor tiempo de hospitalización, menor dolor postoperatorio y regreso más precoz a la actividades normales comparado con la cirugía convencional (ver laparoscopia). Al mes siguiente a la operación se realiza una ecografía transvaginal para evaluar la evolución de la cicatrización del útero, y definir cuando se puede reiniciar la búsqueda del embarazo. En general cuando el mioma abarca todo el espesor de la pared del útero se indicará la realización de una cesarea electiva en el embarazo posterior.